¡Muy buenas, aquí Davinnistrad de nuevo! Como podéis leer en el título, esta vez vuelvo a hablaros de Modern, un formato que tengo algo abandonado desde hace bastante tiempo porque he encontrado mi amor verdadero: Commander. Sin embargo, me es imposible pasar por alto alguno de los decks más curiosos que veo a diferentes streamers de Magic jugar, y el descubrimiento de este en concreto se lo debo a Daniela Díaz (os dejo aquí un enlace a su twitch).
Sin entretenernos mucho más, vamos a analizar el deck, que gira alrededor de un artefacto infrecuente de Amonkhet que conoceréis si habéis jugado sellado. Si no, difícil lo veo. El artefacto en cuestión es Oketra’s Monument, una piedra que reduce el coste de las criaturas blancas que jugamos, y que nos regala chinches con vigilancia siempre que casteemos uno. Combinándolo con las criaturas necesarias, tenemos una powerhouse brutal aquí, y por eso queremos llevar no menos de tres copias (la cuarta, al ser un artefacto legendario, es algo más arriesgado llevarla por si nos robamos demasiados).
La principal criatura con la que queremos combar es el
Whitemane Lion, un oso con Flash que nos pide devolvernos un bicho a la mano cuando entra. Normalmente podemos entenderlo o como un handicap o como una forma algo más cara de de lo que sería razonable de salvar a uno de nuestros bichos. Pero si tenemos un Oketra’s Monument en mesa, el bicho de pronto pasa a ser un: «W: Create a 1/1 white Warrior creature token with vigilance». A velocidad de instantáneo y sin pega alguna. Hacia esto está enfocado nuestro deck: queremos aprovechar todo el value de diferentes criaturas al máximo, mientras con el Monumento reducimos su coste y creamos chinches más rápido de lo que nuestro oponente puede preveer.
Wall of Omens es útil tanto en los primeros turnos como en late game, en forma de un culo 4 que puede parar unos cuantos ataques y darnos tiempo mientras nos ayuda a profundizar en el deck y a encontrar uno de los Monumentos. Una vez tengamos uno en mesa, podremos jugar los muros por un solo maná, robar una carta y crear un token, un value muy relevante en puntos donde la partida se ha estancado.
También jugamos un playset de Squadron Hawk, porque nos dan presencia en mesa, 
ventaja de cartas, nos ayudan a vaciar el deck si necesitamos robar tierras y solo cuestan un maná por el Monumento. Value town, boyz.
Judge’s Familiar es una carta para que el jugador decida cuántas copias quiere, ya que es muy útil contra unos pairings y contra otros… no tanto. Muchas listas llevan cuatro copias, pero podemos reducir ese número para aumentar los dos Path to Exile que llevamos.
El splash a azul sigue con un playset de Reflector Mage, otra carta para controlar a nuestro oponente durante el early game, y que más adelante podremos jugar por solo dos manás. Además, tenemos que tener en cuenta que los efectos ETB como este o como el del Wall of Omens los podemos volver a aprovechar con nuestro Whitemane Lion.
También jugamos un un playset de Spell Queller, un counter que pega por el aire y que si ya es poderoso por tres manás, por dos manás y generando un 1/1 con vigilancia es absurdo. El hecho de que nos
deje exiliar todas las iras relevantes del formato (incluyendo el incontrarrestable Supreme Veredict) hace que en este deck sea especialmente útil, ya que no tenemos muchas más formas de lidiar con removals masivos.
Por último, y como coste tope de la curva tenemos tres copias de Sky Hussar, una de las cartas con la habilidad de los Azorios del Ravnica original: Forecast. Revelando esta carta de la mano y pagando un coste (no de maná en esta ocasión) podemos activar una habilidad, aunque únicamente sea durante nuestro mantenimiento. Con la 
gran cantidad de chinches que vamos a generar, estaremos robando dos cartas adicionales por turno, un fuelle que en partida avanzada puede suponer la diferencia entre seguir el ritmo a nuestro oponente o perder.
Para asegurarnos de tener un motor de robo estable desde el principio, Serum Visions es muy importante en este deck, y lo mismo ocurre con Path to Exile para protegernos. Pero como removal contamos con una de las nuevas joyas de Amonkhet, Dusk / Dawn. Una ira que no toca a nuestras criaturas (vale, salvo a los Hussar, pero no cuentan), que revienta a muchos bichos peligrosos del formato, que además nos sirve para recuperar muchos de nuestros bichos caídos en batalla es un must play en un deck como este, que pierde bastante fuelle cuando le revientan las criaturas.
Para acabar, os enlazo aquí la lista que jugó Daniela Díaz en uno de sus streams. ¿Qué os parece el deck? ¿Habéis intentado algún experimento con Oketra’s Monument o algona carta del ciclo anteriormente? Recordad que para cualquier cosa me tenéis en mis redes sociales, en mi correo y en los comentarios del blog. ¡Un saludo! 😀
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El Rincón de Magic 
Escrito por davinnistrad
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