En el Magic, como en la vida, es importante poseer el conocimiento y la sabiduría necesaria para saber diferenciar el cariño del apego. El cariño, por definición, no aporta nada malo. Al contrario, nos hace generar buenas y positivas sensaciones para con las cosas, situaciones o personas hacia quien lo generamos. El apego, por el contrario, conlleva siempre matices negativos (aunque no los veamos, o no queramos verlos). El apego nos ciega hasta el punto de no dejarnos ver que estamos perdiendo la perspectiva de la realidad. El apego es muy hábil y suele mimetizarse con palabras del tipo: afición, hobbie, nostalgia, pero es nuestro deber saber identificarlo para poder erradicarlo de nosotros, antes de que nos cause un considerable daño, en forma de pérdida de tiempo vital, recursos perecederos y/o amistades verdaderas. Pero hoy no voy a escribir sobre nada negativo. Hoy quería dedicarle unos pequeños párrafos a uno de los nexos de unión más fuertes que existen en el Magic (físico). Un ente intangible capaz de otorgarle cualidades humanas a objetos inanimados. Un concepto sensorial, físicamente no demostrable, que vive en la casilla del cariño. Me refiero a la simbiosis única e intransferible que existe entre el jugador y su mazo. (más…)